miércoles, 18 de abril de 2018

Hay días buenos y días malos

El proceso de recuperación del abuso narcisista no es un camino recto. Hay subidas y bajadas, terreno escabroso lleno de espinas y a veces se pasa por campos floreados.

Hoy quiero hablarte de esos días malos.

Estas semanas he vuelto a tener días malos donde el sentimiento de que la vida es injusta regresa y me hace sentir infeliz. Analizando todo, creo que pasa cuando las cosas se juntan.
He estado enferma, con muchas citas médicas, trabajo, niños... 

Es cuando uno piensa "Para qué me separé?" "Por qué tengo que hacer las cosas sola?" "Será que yo soy la que está mal?"

Y la disonancia cognitiva aparece de nuevo, pero no se preocupen, es normal sentirse muy mal algunas veces.

Es normal querer regresar a lo que estábamos acostumbrados, aunque sea el abuso, es algo familiar a lo que ya nos habíamos encariñado de cierta forma. 

Cambiar y salir adelante es un trabajo de tiempo completo que requiere de todos nuestros recursos, los cuáles se agotan de vez en cuando.

Y estos días han sido muy difíciles, mucho, muy difíciles. 

Es cuando me aferro a la idea de que una vida mejor es posible y que este es el camino correcto. Fe, le llaman.

Me niego a vivir sin ella, todo va a estar bien.

¿Cómo le hacen para sobrevivir a los días difíciles?

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